30 octubre 2006

el gesto de un nene

Un nene en los asientos del metro, absorto en su propia magia, descubre de pronto, con asombro, mi mirada contemplándolo. Dos miradas, dos muecas y dos sonrisas. El nene, con la naturalidad de un parpadeo, se incorpora, y dando unas palmaditas en el asiento de al lado, me invita a sentarme con él. En el resto de trayecto que compartimos no pude averiguar su nombre, pues apenas hablaba, pero estuvimos jugando con una pelotita mágica que me devolvió de un bote a la infancia. Luego, de camino a casa, no pude quitarme de la cabeza ese gesto inocente y dulce que me llamaba, sin conocerme de nada, a sentarme a su lado.

Nos vestimos en esta vida con capas y capas de prejuicios, tabúes y formalismos, y parcemos adultos, mas nos olvidamos de que podemos desnudarnos y sentir sobre la piel la frescura de un viento desenfadado llamado niñez.

12 Comments:

Anonymous Anónimo dijo...

cuando hubo que bajar del subte, quien pidio permiso y dijo gracias fue la hija y no la madre

besos

7:08 p. m.  
Blogger Marta dijo...

Parece que contemples como yo lo hago... donde sea, a quien sea, todo lo que te rodea.
Y la verdad, es un gusto leerte sin tanta capa, así resulta más sencillo contemplarte...
Beso de una nena.

7:40 p. m.  
Blogger Canichu, el espía del bar dijo...

la inocencia de los niños es la inocencia perdida de los adultos. Quizá porque los adultos ya han recibido daños que no quieren repetir. Yo en un tren me hice amigo de una niña de dos años. Se aburría y los padres no sabían qué hacer con ella. No hablaban mi idioma, pero le hice un elefante de papel y la niña me regaló un caramelo. Inocencia pura. en realidad todos queremos lo mismo, cariño y buenos momentos, en este caso expresados con un juguete improvisado en papel. Los adultos lo complicamos todo.

11:25 a. m.  
Blogger Wara dijo...

Nunca dejamos de aprender, y no precisamente de los adultos, sino de los niños. Gran fuente del saber.

11:49 a. m.  
Blogger Lucia Gomez dijo...

No hay ningún alma que se pueda igualar a la de un niño. Capas de prejuicios, como una cebolla, eh niño? Cafe Lisboa, Barrio del Carmen, valencia, 4 de noviembre a eso de las 6 de la tarde. MIl besos y recuerdos

12:48 a. m.  
Blogger bullet with butterfly wings dijo...

me retorcío el corazón tu relato de no adulto, no corrupto

12:53 a. m.  
Blogger Amaranta dijo...

El otro día haciendo limpieza encontré mi primer diario. Apenas tenía 8 años cuando lo empecé y había anotaciones desde la niñez hasta mi adolescencia.
Estuve leyéndolo y, aunque no estoy segura de si será del todo bueno o no, conseguí reconocerme aún en muchas de esas páginas.
Muy bonito tu post y no sólo por el gesto de ese niño sino por el de ese adulto que se paró a mirar a un niño en el metro y jugó con una pelotita mágica…
Un beso. Amaranta

11:38 a. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

madrid, linea 53 de bus, hace unos meses de lunes a viernes.
siempre coincidia con la misma gente al ir al curro.
y entre ellos una pareja a la que me encantaba observar, formada por la coincidencia de horarios y destinos...
una niña de unos cuatro años que iba al cole con su madre y un señor de entre 55 y 60 que imagino iria a su trabajo
se hacian reir mutuamente, se despedian con un ¡hasta mañana!
mientras, entre la madre y el hombre apenas habia un cruce de miradas en el trayecto que compartian, apenas un gesto de despedida...
toda su atencion era para la niña...
dicen que segun vamos envejeciendo nos parecemos mas a los niños, somos mas espontaneos o nos importa todo menos...
sera porque nos damos cuenta de lo importante que es no perder esa espontaneidad??

parece que te estoy viendo jugando con el niño!!

9:23 p. m.  
Blogger SaYuRaKa dijo...

Niños..maravillosos..impredecibles...auténticos...geniales...
un saludo,
SaYu

6:46 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Cuanta razón tienes y cuantas veces me he planteado en silencio en situaciones en las que me apetece romper todas las reglas que pasaría si volviendo a la inocencia un día entrara alguien que llamara mi atención y yo también le ofreciera el asiento del al lado.
Desgraciadamente esas capas de las que hablas están demasiado pegadas, son muchos años de contención, y no he sido nunca capaz.

6:47 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

Kaixo mikelito !
me ha gustado mucho tu experiencia con el niño , yo en vez de sentirme niño en ese caso me sentiria un poco estupido y eso es lo que tenemos que cambiar, tantas capas de prejuicios , seguro que miraria antes a ambos lados para asegurarme de que nadie se reiria de mi , si hay algo que e aprendido contigo en Barna es a reirnos de nosotros mismos... recuerdas cuando me obligasteis a vestirme de capitalista en aquella acción ? al principio me cabreaba el tener que hacerlo para quedar bien con los del piso y para que celia no se sintiera mal , pero luego con el gorro puesto y el latigo en la mano ... no sé aprendi ese dia KE OSTIAS ! vamos a reirnos de la puta normalidad... abajo los muros de nuestro puto ego , somos algo mas que caras de sapo !!!

1:33 p. m.  
Blogger Alnitak dijo...

Ayer alguien me dijo que acababa de ver en mis ojos y en mis palabras a una niña de 8 años, yo hablaba de Peter Pan y Campanilla como si fueran mis grandes ídolos, pero me sorprendió que justo dijera esa edad. Fue la edad que deseé tener cuando soplé las velas de mi décimotercer cumpleaños. Quizás, en el fondo, muy en el fondo, ese deseo haya sido el único que se haya cumplido hasta ahora.

9:30 a. m.  

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